Doce Vampiro - Rita Lee

La daga de Johel

Mi alma viaja de ciudad en ciudad
De luz en luz cuando el cosmos me enreda
No me olvido del mar, el que nació después de mí
Ni de mi madre que era la luna sobre ese mar.
Tuve en el bolsillo un pasaje sin destino
Que me dejo junto a un rio sin mar
Donde deje una cuantas semillas
A unos cuantos locos cuerdos
A unos cuantos cuerdos sin pensar
Pero algo más buscaba en mí y en ti
Y es lo que me hizo partir
Hacia el frio donde algo debía escuchar
Donde me cubrieron las cenizas del Chaiten
Donde casi muero en el
Donde tu corazón es el que pelea
El que me dijo que no muera.
(Amor, sabes que volveré pero reza por el, reza por Johel)

Pena (L7s7)

2 comentarios:

Unknown dijo...

Gracias,querido amigo, por poner en mi boca palabras que dije, diré o diría. Es que las almas afines generan sentimientos similares, y eso multiplica la energía. Poco a poco el universo se va pintando de un nuevo color hasta que llegará el día en que su policromía vibrará como si se tratara de un único color que contiene a todos los demás.
Gracias otra vez.

Unknown dijo...

Esta todo tan, pero tan perfecto... que aquí tambien hay que entrar descalzos.Espero que guardes esta joya...para "ese día". Graciassssssssssssss Samu!! Tkm!!